Nacidas para el porno trata de mujeres que se vieron abocadas a este negocio por una cuestión de destino. Las estrellas se alinearon de tal manera que éste fue su inevitable resultado final. Estaban destinadas a chupar pollas y nosotros a verlas.
Missy Monroe aprovecha al máximo su oportunidad de impresionar a sus nuevos jefes. Con una sólida actuación ya garantizada, va un paso más allá y deja que su hombre la empuje a la posición de piledriver contra el brazo del sofá para follársela a fondo.
Mandy Bright tiene un culo que ha sido follado desde que tiene memoria. Probablemente ha pasado más tiempo con una polla en el culo que con el agujero vacío. Es ese tipo de agallas y determinación lo que la convierte en una auténtica estrella.
Nikki Hunter se come la polla como una carnívora hambrienta de carne fresca. Desde su culo hasta su boca, este delicioso palo de ternera le hace un circuito completo dejándola dolorida, cansada y ¡totalmente feliz!
Trina Michaels se ha operado las tetas siete veces diferentes. ¿Por qué? Porque ser follada en películas porno es su destino y está totalmente entregada a su suerte en la vida... ¡como muñeca chupadora de semen para hombres extraños y los millones de personas de todo el mundo que las vemos!
Puede parecer dulce al principio, pero rápidamente se despoja de esa conducta recatada y se convierte en una marioneta chupadora enloquecida por el sexo en cuanto tiene una polla cerca de la boca. Lauren Phoenix ansía la polla como la mayoría de los hombres y el fútbol. ¡Es una pasión de todo el año!